Esta información le ayudará a aprender sobre el delirio. También le ayudará a cuidar de un amigo o familiar con delirio.
Información sobre el delirio
El delirio es un cambio repentino en la forma en que una persona piensa y actúa. Las personas con delirio no pueden prestar atención a lo que sucede alrededor de ellos, y su pensamiento no es organizado. Esto puede ser alarmante para la persona con delirio, su familia, sus cuidadores y sus amigos.
El delirio puede comenzar en unas horas o en varios días. Los síntomas pueden ir y venir. La mayor parte del tiempo, el delirio es consecuencia de una enfermedad o lesión.
El delirio no es lo mismo que la demencia. La demencia es un estado de confusión que lentamente empeora con el tiempo y no mejorará. El delirio sucede de forma repentina y generalmente mejora con tratamiento.
Indicios de delirio
Una persona con delirio puede tener 1 o más de estos indicios. La persona puede:
- Parecer confundida.
- Estar inquieta y molesta.
- Enojarse o molestarse con facilidad.
- Parecer preocupada.
- Estar paranoica (se preocupa de que alguien intente lastimarla).
- Estar más alerta que de costumbre.
- Tener problemas para permanecer despierta.
- Parecer o actuar deprimida.
- No tener lógica cuando habla.
- Ver o escuchar cosas que no están allí.
- Confundir los días y las noches.
- Ser olvidadiza.
- Tener problemas para concentrarse.
- No saber dónde está.
Llame al médico o al enfermero de la persona de inmediato si parece estar confundida o muestra cualquier indicio de delirio.
Causas del delirio
Hay distintos factores que pueden causar el delirio. Algunas causas comunes son:
- Infección
- Efectos secundarios de los medicamentos o un cambio en los medicamentos
- Cirugía reciente con anestesia (medicamentos que hacen que se duerma)
- Enfermedad crónica que empeora. Una enfermedad crónica es una enfermedad que continúa durante un largo período y a menudo no desaparece completamente (como enfermedad renal o hepática).
- Niveles bajos o altos de sodio, potasio, calcio o magnesio en la sangre
- Deshidratación (falta de agua en el cuerpo)
- No comer suficiente, o no obtener suficientes nutrientes de los alimentos durante mucho tiempo
- Nivel alto o bajo de azúcar en la sangre
- Estreñimiento (defecar con menos frecuencia de lo normal)
- No poder orinar
- Dolor
- Consumir demasiado alcohol o si alguien deja de consumir alcohol de forma repentina
- Abstinencia de benzodiazepines u otros medicamentos sedantes-hipnóticos (medicamentos para relajarse). Por ejemplo, Lorazepam (Ativan®), alprazolam (Xanax®) y diazepam (Valium®) son benzodiacepinas comunes. No tener suficiente vitamina B1 (tiamina)
Factores de riesgo del delirio
Algunos factores hacen que una persona tenga un riesgo más alto de tener delirio. Una persona puede tener riesgo de delirio si:
- Tiene más de 70 años.
- Ha tenido delirio en el pasado.
- Tiene problemas de memoria o pensamiento.
- Está en el hospital a causa de una enfermedad grave.
- Está deshidratada.
- Tiene mucho vómito o diarrea (defecación blanda o aguada).
- Tiene problemas para ver o escuchar.
- Toma 5 o más medicamentos diferentes.
- Utiliza un respirador.
Tratamiento del delirio
La mejor forma de tratar el delirio es encontrar y tratar la causa. En ocasiones, es necesario realizar muchas pruebas para encontrar la causa. Estas pruebas pueden incluir análisis de sangre, radiografías, imagenología del cerebro (como una IRM y tomografías computarizadas (CT)) y electrocardiogramas (ECG). El médico o enfermero de la persona también le hará preguntas sobre su historial clínico como enfermedades pasadas, tratamientos y otros asuntos relacionados con su salud.
Cuando se encuentra la causa del delirio, se puede comenzar con el tratamiento. Si la persona está molesta o nerviosa, es posible que le den medicamentos para ayudarle a relajarse. Se sacará de la habitación el equipo médico que no sea necesario para ayudarle a que se sienta segura. Algunas personas también tendrán a alguien en la habitación para asegurarse de que están seguros, como un asistente de enfermería.
Cómo ayudar a una persona con delirio
Hay muchas formas en las que puede ayudar a una persona con delirio. Puede ayudarle de las siguientes maneras:
- Alentar a que descanse y duerma.
- Mantener su habitación en silencio y calma.
- Asegurarse de que está cómoda.
- Alentar a levantarse y sentarse en una silla durante el día.
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Alentar a que trabaje con un fisioterapeuta o terapeuta ocupacional.
- Un fisioterapeuta puede ayudarle a moverse y salir de la cama.
- Un terapeuta ocupacional le puede ayudar con las tareas diarias para cuidarse (como ir al baño) y mostrarle qué ejercicios mentales puede hacer (como Sudoku o crucigramas).
- Ayudarle a comer y beber.
- Asegurarse de que toma mucho líquido.
- Asegurarse de que tienen sus anteojos, audífonos o ambos.
- Pedir a sus amigos que le visiten, si es posible.
- Hablar de acontecimientos actuales o cosas dentro o fuera de su habitación.
- Explicar dónde está y por qué está allí.
- Leer libros o cartas.
- Poner música que le guste o música relajante.
- Traer objetos familiares de la casa (como almohadas o fotografías).
Recuperación del delirio
El delirio puede durar de un día a meses, en algunos casos. Si los problemas médicos de la persona mejoran, es posible que se vaya a casa antes de que el delirio desaparezca. Los síntomas de delirio de algunas personas mejoran mucho cuando van a su hogar. Es posible que otras personas tengan problemas de memoria y olviden la fecha y dónde están por meses después de que se trate la causa del delirio.
Su médico, enfermero, trabajador social y administrador de caso le ayudarán a elaborar un plan de cuidado en casa. Llame a su médico o enfermero si tiene preguntas o inquietudes.